August 30, 2008

ma garderie



A algunos de ustedes ya les había contado el suplicio que es encontrar lugar en una guardería en Montreal. Pues bien, los esfuerzos, llamadas, mails y los milagritos comprados en Real de Catorce por Sta. Dora dieron resultado. No quiero cantar victoria pero Michelle ya fue por primera vez a la guardería y parece que le gustó.
 
Su maestra es marroquí y sus compañeros son: una niña de Africa, uno de Corea y uno de Quebec, el marido dice que están listos para el poster de "United Colors of Beneton". Lo más increible de todo es que tras 2 días la niña entendía mejor que yo a lo que la maestra se refería cuando daba una instrucción. Definitivamente debo mejorar la oreja, si no ya la estoy oyendo a los 6 años diciendo "nooo, la maestra no dijo que había tarea, entendiste mal". 
 

En sus marcas...

La semana que viene comenzarán las actividades en Montreal. Aldo comienza en McGill y yo iré al examen de ubicación de francés para mis clases. Las vacaciones (si es que tuvimos) terminaron.  

Joyeux anniversaire



Pasó lo que tenía que pasar, Michelle cumplió 1 año y hasta pastel con invitados tuvo. Vinieron Montse, Héctor y Marcela además de nuestros nuevos amigos Indira e Israel (papás de 2 perros) y de Sara con sus papás, Mauricio y Ana.

Los comentarios generales fue que el pastel me quedó rico. La mamá feliz. Globos, manteles de colores y nieve también estuvieron presentes. A las 8 en punto Michelle despidió a sus invitados para ir a dormir y papá y mamá se quedaron en el chal. 

Michelle feliz con la compañía y los regalos. 


DVD en casa


Hay que admitir que esto de tener finalmente un DVD instalado en la Televisión proporciona infinitas posibiliades para entretener a la Mademoiselle. Aquí van algunas de ellas:
1. Poner los DVD de Los Muppets (ya agregamos a la colección la temporada 3 com-ple-ta).
2. Poner los DVD que trajimos de Mexico con las caricaturas que le gustan de NatGeo.
3. Grabar sus nuevos programas favoritos en francés (Cornemusse y Dora l´exploratrice, que aquí no habla inglés y español sino francés e inglés). 
4. Inslatar su nuevo juguete Leap Frog que se conecta inalámbricamente al DVD y que le permite interactuar con lo que sucede en la pantalla a través de unos controles tipo videojuego. 
5. Ponerle los videos de sus eventos especiales, que a su corta edad, se reduce a 1 y a las grabaciones que hace la mamá. Cuando eso pasa, se mira en la pantalla y pone cara de "¿si estoy aquí por qué también estoy allá?". Ahh los misterios de la TV... 
 
  

Un domingo



Inicialmente iba a ser un domingo de flojera y terminó siendo de hacer los trabajos que se necesitaban en la casa. 
Mónica tiene hamaca en el patio.
Aldo tiene XM instalado después de batallar todo el día (¿han intentado hacer un agujero en la pared sin taladro?). 
Michelle tiene juguetes armados y DVD en la TV para ver a los Muppets.
No sé que fue peor, si quedarnos en casa o salir. Terminamos muertos. 
 

August 23, 2008

spanking

Quienes me conocen saben que no tengo ningún problema con los locos, inclusive tengo a muchos como amigos y francamente me parecen de lo más divertidos, pero eso de ir por la vida en metro y camión me cruza con especímenes de lo más extraños. 

Ya en otros viajes nos había tocado encontrarnos con gente que habla incoherencias sola (no sólo incoherencias, como he conocido a muuuchas en mi vida) e inclusive que se van autoflagelando. Cada quién sus gustos. 
 
Sin embargo el jueves estaba de lo más tranquila esperando el metro tras salir de un curso, cuando de repente siento una nalgada no muy fuerte pero lo suficiente para lanzar un "ay cabrón" en mi muy florido mexicano. Al voltear dispuesta a dar un zopapo al atrevido al que se le antojó mi trasero, me doy cuenta que era una abuelita quebeca, de esas pequeñitas con los cabellos blancos y peinada a la antigua con un bote de laca, hagan de cuenta la abuelita del gato Silvestre que siempre defendía al Piolín. Santíiisssssima ella. Evidentemente me saco de onda al ver aquella estampa y apenas estaba reaccionando cuando veo que la señora sale disparada de mi lado y pone en la mira a una muchacha con bastante buen trasero, la centra, la mide, apunta ... y la muchacha se mueve sin querer para platicar con una amiga. Tras fallar el golpe y ante el despiste de la muchacha que no se había dado cuenta de nada, la ñora se regresa, se acerca, prepara la mano ¡¡y le da tres nalgadas bien dadas!! se los juro, yo en ese instante me moría de la risa y agradecí porque a mi sólo me tocó una. Lo que hay que ver...
  

August 21, 2008

une naissance, un livre


¡¡Michelle ya tiene su primera tarjeta de biblioteca!! tanto niña como papás estamos felices ante la perspectiva de pasar las horas en la biblioteca y de tener CD, DVD y libros a disposición sin costo. El área de nños hasta tiene juguetes y hay un jardín lindísimo para sentarse afuera a leer y tomar un refresco. La biblioteca más cercana está a 2 cuadras de la casa, lo que resultará muy conveniente sobre todo en invierno. 

Cuando el marido y yo fuimos a sacar nuestra tarjeta, nos dijeron que si Michelle tenía menos de un año podíamos inscribirla y le daban un regalo, así que aprovechamos y le dieron 3 libros de cuentos, un libro para que los papás incentiven a los niños a leer, un vale por 10 dólares en una tienda de libros y 2 revistas especializadas en papás que se llama enfants québec, todo en una bolsita muy coqueta. 

Lo que me encantó fue el nombre de la campaña, se llama "une naissance, un livre", ¿verdad que es lindo?
    

mg et le mouffette

"¿Pues a qué rancho me trajiste?" fue la pregunta que lancé al marido cuando nos dimos cuenta que en el patio de la casa hay ardillas, arañas, mapaches y hasta un zorrillo. No parece que vivimos en pleno Montreal, más si tomamos en cuenta que la ciudad ¡es una isla! no está en medio del bosque. Que haya gaviotas lo entiendo, pero ¿zorrillos? la cosa está de locos. 

Los perros no están felices con la idea de que les invadan su espacio, así que después de declarar la guerra al zorrillo se dedican a vigilar el patio. Desafortunadamente el primer encontronazo ya se llevó a cabo hace un par de días y la Mocha resultó acreedora de un delicioso aroma a zorrillo. Aldo y yo nos dedicamos a rociarla con tomate, limón y anexos, sin embargo tuvimos que mandarla bañar para que le aplicaran un liquido especial porque durante 2 días la pobre estuvo en cuarentena en el sótano. 

Ahora que ya no huele tan mal le dimos luz verde para que entre a la casa. En ese instante el marido comenzó a tomar decisiones: no salen al patio en la noche y hay que vigilarlos en el día, también se paró en la oficina del barrio a preguntar qué se hace en estos casos. Quienes nos conocen saben que amamos a los animales pero eso de no poder ni tocarlos porque están más protegidos que nosotros es una exageración. En estos momentos estamos pensando seriamente en poner toallas con amoniaco alrededor del patio para que no entren y que se vayan a la casa de los vecinos. 

Aldo investigó por Internet y hay más zorrillos y ardillas por metro cuadrado, que gente. La guerra sigue.   

August 17, 2008

The right spot

Hoy un lector del bliog me hizo notar que no he hablado casi de Choice y Mocha, cosa que remediaré ahora mismo. 

Choice
Quienes conocen al Sr. Choice saben que es un perro extremadamente estresado que se toma la responsabilidad de cuidar la casa muy a pecho y el hecho de que le cambiaran el esquema hizo que se estresara un poco, sin embargo una vez sintiendo el espacio como suyo, se dedica en cuerpo y alma a ladrar a los vecinos (el pobre nunca había tenido vecinos sólo separados por unas ramas) y a pipear en todo el patio, tras lo cual regresa a la casa con cara de "well done".  
Su mayor travesura consiste en meter la cabeza en el bote de basura, por lo que el marido y yo ya encargamos uno con tapa más pesada que no pueda levantar. Es el más friolento, así que ya compramos un par de cojines para que duerman en la sala de la casa. Les encantan.   

Mocha
Es la que más disfruta estar al aire libre, así que si por ella fuera estaría todo el día tendida al sol en el patio. Eso no sería tan malo si no fuera porque no estamos muy seguros de que los arreglos que el marido y Héctor le hicieron al patio funcionen bien y no vaya a terminar en casa de los vecinos. Mientras tomamos más confianza la dejamos salir varias veces al día y nos damos la vuelta de vez en cuando para tenerla vigilada. 

Sus orejas han resentido la humedad y anda molesta, ya le aplicamos su medicina pero la pobre no termina de estar bien. Por otra parte sigue siendo la más cariñosa de los dos y vigila y protege a Michelle. Ella feliz los disfruta como loca ahora que ya camina, lo único que todavía no ha entendido es que no debe apoyarse en ellos cuando se quiere levantar ya que se pueden mover, lo curioso es que cuando eso pasa, se mantienen quietos hasta que ella se levanta. Mamá vigila.   

Fête des enfants


Hoy fuimos a la Fête des enfants de Montréal que se celebró en un parque ubicado en una isla cercana (la misma donde está el casino de Montreal). Cuando entramos al metro me empaniqué porque estaba aquello lleno de niños con carreolas, familias y gente, mucha gente y pensé "va a ser eso como estar en la macro en 16 de septiembre", pero cuál fue mi sorpresa al darme cuenta que pudimos ver los espectáculos, sentarnos bajo un árbol a comer y a hacer nada y pasear por el parque sin aventarnos ni que nos aventaran. Sinceramente y aunque el clima era un poco cálido (24 C) y el sol estaba picosín, el aire estaba fresco y la Michelle disfrutó como enana cuando la llevamos a donde estaban bailando y se integró a un típico baile quebecois con singular alegría. 

Lo más interesante fue ver como a nuestro lado pasaban familias de todas las nacionalidades e incluso varias familias mixtas. En la parte central había un puesto que se llamaba ¨Las fiestas mexicanas¨ o algo así, que tenía una piñata colgada y donde estaban una señora y dos muchachas pasando a los niños a pegarle a la piñata mientras cantaban el clásico ¨dale, dale, dale...". Fue divertido ver a un niño asiático, que hablaba francés, pegarle a una piñata mexicana mientras se oía de fondo música cubana del puesto de al lado. Eso es globalización. La Michelle feliz. Punto para mamá y papá. 
   

August 16, 2008

La visita


En medio de la ajetreada semana, llegaron a visitarnos los tíos que como reyes magos, trajeron consigo además de cariño para nosotros y la beba, nuestros recuerdos, ropa de invierno, discos, libros, mi hamaca y misceláneos que mandaron los abuelos.

De su aventura mejor no hablemos porque lo que pasamos por Delta no es nada comparado con lo que ellos pasaron con AA y el recibimiento que por cortesía de las aduanas de Canadá recibieron. La familia Canizales Gutiérrez al completo les agradece la oportunidad de disfrutarlos y de tener el pretexto perfecto para conocer Montreal.

¡¡Mil gracias!! 

     

Michelle y los paseos














Como es de esperarse la Mademoiselle tiene sus días buenos y malos, el viernes se portó de maravilla ya que fuimos a recorrer por primera vez Montreal como turistas con camioncito de 2 niveles incluido. Durmió y comió en las más raras condiciones, lo que para ella es un esfuerzo sobrehumano. El papá y la mamá felices y orgullosos de su pequeña que se portó a la altura. Tanta belleza no puede durar para siempre y el sábado nos dió una función especial de una obra cada vez más representada titulada "quiero que me cargues pero no me toques" en medio del Mall cercano a la casa. Así es, mis queridos, quería que la cargáramos y cuando lo hacíamos repelaba porque quería bajarse; quería que la dejáramos sola y cuando le cumplíamos el capricho quería que la subiéramos... oh sí, divertido es poco. Lo que sí aprendimos es que cuando se pone así, no hay cosa que la complazca, así que es mejor no intentarlo. 

A pesar de los berrinches ocasionales hay una constante y es que ella se pone feliz y radiante cuando la ponemos en la carreola porque eso significa calle. Ya afuera es otra cosa porque si está moviéndose es la más feliz, pero si hay que esperar un camión o un metro, el estado de humor cambia y la desesperación la consume. Dónde he visto yo eso antes... a qué me suena...  

Semana "movidita"



Si la semana pasada estuvo de locura, esta semana no estuvo menos ajetreada. Comenzamos con unos días de muchos trámites y terminamos con una visita llena de cariño y un día para los niños.

Azules y Rojos
El lunes decidimos que era buen momento para comenzar con nuestros trámites con el gobierno, de entrada fuimos a la oficina de inmigrantes para que nos dieran una plática con algo así como ¨todo lo que necesita usted saber para sobrevivir en Quebec y no morir en el intento¨. Como no podíamos ir los dos porque no aceptan niños, decidimos que iría yo en vista de que seré quien reciba los beneficios del gobierno con las clases de francés y esas cosas. 

Ya nos dimos cuenta que aquí hay que saber que dependiendo de la oficina a la que vas, es el papel que necesitas. Si vas del lado de los rojos (léase Canadá) probablemente necesite la tarjeta de residente, pero si voy a una oficina azúl (del gobierno de Quebec), lo que debo llevar casi tatuado a la piel es el CSQ (Certificado de Selección de Quebec). Como al inicio llevábamos una cosa y no la otra, hemos tenido que hacer varias veces un trámite por culpa del despiste de los colores. No sé por qué, pero me sentí en Barcelona otra vez...

En la charla con el gobierno nos dieron información que por un lado sirvió para saber qué cosas queremos/podemos hacer ahora y cuáles no. Por ejemplo, es Urgente que en este año saquemos la credencial de manejar ya que si nos esperamos al año que viene tendremos que ir a una escuela de manejo a fuerza y cuando podamos practicar en un coche llevar siempre durante un año a un acompañante que esté autorizado. Está bien pensado para papás e hijos pero no para inmigrantes para quienes el más seguro acompañante es el/la marido/a que está en las mismas circunstancias. También supimos lo que se necesita para la nacionalidad y los organismos de ayuda para el inmigrante. 

Entre las ventajas de estar aquí es que los "azules" nos becan a los no francoparlantes en eldenominado afrancesamiento (traducción libre). Mientras me preparo para hacer el examen de ubicación y me llaman diciendo que hay cupo para estudiar de tiempo completo (de 9 a 3), entraré a partir del lunes a unos cursos gratuitos y de tiempo parcial (9 horas/semana). En la entrevista que yo pensé era de ubicación, hablo con una argentina que me dice que ella trabaja para el gobierno de Quebec, que no habla inglés y que no habla bien el francés ("por lo que has estudiado a lo mejor estamos en el mismo nivel", me dice y yo pienso "¿tan mal francés tengo?") y cuyo trabajo es tratar con los inmigrantes no sólo latinos, sino de todas las nacionalidades y darles lugar en los cursos, de hecho mientras hablábamos le habló un inmigrante chino o japonés y me dice "a estos no les entiendo nada ni viniendo, menos por teléfono". Me cae que si ella encontró trabajo aquí, yo encuentro.  

La siguiente semana nos tocará tramitar una legalización del CSQ para la assurance maladie (seguro médico) y buscar guardería para Michelle. La mamá tiembla. 

Aldo y McGill
Siguiendo con los trámites, el marido ya tiene credencial de McGill y ya hasta le dieron 2 libros que les dan a todos los estudiantes cuando llegan a tomarse la foto, cuando me los eneseña veo que uno de ellos es de "cómo citar sin cometer plagio" o algo así que les sonará mucho cualquier miembro de mi familia y amigos que esté en esto de la enseñada. Mira que estos canadienses son listos y te encargan que leas el librito antes de entrar para que estés "avisado". 



 
  
    


    
 

August 07, 2008

La llegada



Comienzo este blog 2 días después de haber llegado a Montreal en la denominada "época Montreal". Para no aburrir a quienes tienen la osadía de leer el blog y para quienes quieren ahorrar tiempo dividiré por temas la llegada.

El despegue
Si alguien ha viajado en avión con transbordos en vuelos mayores a 1 hora con una niña de casi un año entenderá perfectamente cómo estuvo el trayecto, si a eso le agregamos que por cortesía de Delta tuvimos retrasos en todos los vuelos la cosa se vuelve interesante.  

El día comenzó a las 3:30 de la mañana cuando el marido y yo nos dispusimos a levantarnos para empacar lo último (cosas de baño y miscelaneos). Mis papás se levantaron temprano y hasta la Michelle decidió no hacer el viaje al aeropuerto dormida, ahí los de Delta se portaron excelente y nos pasaron a la sala donde todo parecía normal, hasta la Michelle se durmió en el camioncito camino al avión cuando ya llegando a la escalera de entrada el camión se regresa a la sala de espera, el veredicto: una falla. Vuelta a la sala de espera. Después de pensar que podríamos desayunar en Wings (cosa que intentamos hacer y no pudimos) nos llaman diciendo que debemos ir al front desk a registranos de nuevo porque seguramente perderemos nuestros trasbordos ¡¡¿¿No me digan??!! Total que para no hacerles largo el cuento 2 horas después y con una niña en plena desesperación por despertarla de su sueño, regresamos al punto de partida. La mayor ironía de todas es que cuando finalmente llegamos, nos dijeron que el avión estaba a punto de despegar y que sólo nos estaban esperando a nosotros (¡¡!!). 
En fin, una vez en el avión Michelle se portó excelente, hizo comal y metate con los vecinos, se durmió, estuvo atenta a los foquitos que prendían y no hizo ni ruido en el despegue, las bolsas de aire o el aterrizaje. 

Dado el retraso, estábamos programados para subirnos al vuelo de las 2:30 (nuestro vuelo ooriginal era a las 12:30) así que hicimos una breve parada en Chili`s para calmar el hambre y de vuelta en el avión. Cuando parecía que el resto del viaje transcurriría sin problemas, nos suben al avión y al intentar cerrar la puerta se dan cuenta de que no cierra. Oh sí, mis queridos, aquí nos tienen 1 hora mientras el hombre de mantenimiento descubría por qué no se cerraba la maldita puerta. Debo admitir que aquí Michelle perdió la tranquilidad que la caracteriza (ja!) y estuvo necia, necia, necia, sin embargo si la comparo con los demás pasajeros estuvo a la altura ya que todos, pero todos, echábamos lumbre por estar ahí disfrutando del calor de Atlanta en verano y sin poder movernos de un mini espacio. Nice. Una vez que arrancamos y pusieron en funcionamiento el clima sacamos a la artillería pesada (Muppets y Eric Clapton) y Aldo y Michelle hasta se echaron un sueñito. El resto del viaje transcurrió sin problema. 
 



El recibimiento
Montreal nos recibió con un clima espléndido y la perspectiva de encontrar un taxi en donde cupieran 4 maletas pesadísimas, una carreola, 2 adultos y 1 bebé y 2 mochilas de mano que más bien parecían de cuerpo entero. Cuando estábamos en la fila para conseguir el taxi se acerca una señora y me dice que la niña es encantadora, yo pongo cara de asombro y le digo que si la hubiera visto en el avión no diría lo mismo, la señora me contesta que ella estaba sentada atrás de nosotros y que Michelle se la pasó "platicando" con ella todo el vuelo. Después de que Michelle volvió a desplegar sus encantos con la vecina diciendo adiós con la mano (bueno, su versión de adiós), me cayó el veinte de que estuvimos en un mini espacio con la beba y yo en babilonia porque no me había dado cuenta de nada. Michelle:1, Mamá: 0.

Michelle y Montreal
En cuanto Michelle se subió al taxi comenzó a aplaudir, gritar y bailar; me gustaría pensar que fue porque le gustó lo que veía por la ventana, pero cabe la posibilidad de que estaba hasta la coronilla de aviones y que deseaba cambiar el medio de transporte. Espremos que el romance siga. 

Cuando llegamos a la casa nos encontramos con la sorpresa de que Héctor, Marcela y Montse nos estaban esperando con letrero, globos y cuna armada. Ese recibimiento se mereció nuestro agradecimiento eterno y una cena que hicimos con gusto y placer en un restaurant que se encuentra a 2 cuadras de la casa. En todo este proceso contar con Marce y Héctor ha sido fundamental ya que no sólo no nos sentimos solos, sino que estamos muy bien acompañados. 

Michelle y las tiendas
Tenía pensado poner lo que hemos batallado llevando a una bebé de tiendas, cargados con media casa y sin coche, pero la verdad es que Michelle tiene una relación de amor-odio con las tiendas. Mientras pueda comer todas las etiquetas y recoger todos los papeles del piso, la cosa marcha; pero en cuanto se le ponen límites la cosa cambia, la cara se le transforma y comienza la gritería. Mamá y papá sufren.  

Primer golpe al ego
El día después de que llegamos Aldo me lleva al banco para anexarme a la cuenta y poder tener tarjeta del cajero. 
Cuando la mujer me hace la entrevista para llenar el formato al preguntarme si trabajo y responderle que no, se brinca unas preguntas que después descubro son de escolaridad. o sea que además de floja, burra.  

Day off
Después de una semana de locura, decidimos tomarnos un día libre e ir con los amigos a un día de campo. Tras descubrir que no iba preparada en lo absoluto con lo esencial a pesar de que llevaba 2 mochilas llenas de cosas, me di cuenta que necesito ir a Dollarama con calidad de urgente. Michelle disfrutó como loca y el marido se "asoleó" y sudó con los 26 grados montrealenses. Descubrimos los secretos de viajar en metro y en autobús con Michelle en una carreola más pequeña (con el autobús lleno no les recomiendo las maravillas de carreolas que llevamos en Monterrey) y disfrutamos del verde y del fresco. 

Hoy domingo fuimos a Wall-Mart y en el estacionamiento mientras esperábamos a un taxi (imagínense como ibamos de cargados) Michelle se metió una colilla de cigarro a la boca, una señora Quebecois se dio cuenta y se lo quitó delante de mis narices, me cae... Después fuimos al parque a llevar a los perros a pasear. Aldo y Mónica en calidad de bulto, Michelle y los perros como nuevos. Michelle:2, Mamá:0